El cordobés vive un gran presente. El delantero es la sensación de la Liga italiana. Figura y goleador de Juventus, es seguido de cerca por Barcelona, que ofreció 86 millones de euros. Sueña con jugar con Messi.Por Guillermo Puente
Paulo...”, grita eufórico el locutor del estadio de Juventus. Y los hinchas más eufóricos responden: “¡Dybala..!”. Ese diálogo fanático ocurrió el domingo pasado luego de que el cordobés resolviera un partido demasiado complicado contra Roma. El francés Pogba lo habilitó dentro del área, el ex-Instituto controló la pelota con la zurda y definió con la misma pierna, cruzado, para el delirio de esos tifosis que ya tienen al delantero argentino entre sus ídolos y más aún luego de ese gol.
Paulo lleva 12 goles en su primera temporada con la camiseta de la “Vechia Signora” en la Liga italiana (con siete asistencias) y dos tantos más por la Copa Italia (jugará mañana contra Inter por una de las semifinales). Por eso ya se ganó el corazón de los simpatizantes de Juventus, que encontraron en Paulo un ídolo para reemplazar el hueco que había dejado Tevez la temporada pasada.
Con 22 años, el nacido en Laguna Larga ya es conocido en toda Europa. Es la joya que todos quieren tener. Grandes clubes como Barcelona, Real Madrid y Bayern Munich lo quieren contratar, pero Juventus se puso firme y no quiere desprenderse del futbolista que se formó en La Agustina, el predio que posee Instituto en barrio Jorge Newbery.
El domingo estuvo en la platea del estadio de Juventus un emisario de Barcelona. Robert Fernández es el director deportivo del club catalán y fue a ver a Paulo. Es más, varios medios italianos informaron que el Barsa ofreció 86 millones de euros para asegurarse al cordobés para la temporada que viene. Sin embargo, el club italiano fue enfático: “No se vende, es invendible a cualquier cifra. El chico se quedará en Turín por mucho tiempo. No tiene precio. Olvídense de Dybala”, habría dicho, según el diario italiano Tuttosport, el presidente de “la Juve” Giuseppe Marotta.-
Guiño al Barcelona
“Tengo ganas de jugar con Messi”, aseguró Dybala luego del triunfo frente a Roma y al advertirle que un emisario del club catalán lo había ido a ver. En ese sentido, Paulo contó: “Desconocía que había gente del Barcelona en la tribuna. Me pone contento que me vaya bien, estamos trabajando bien en el equipo y vamos a demostrar que somos capaces de dar más en un futuro”.
La semana pasada se conoció una frase que le habría dicho Lionel Messi a Gerardo Martino en una concentración de la selección argentina: “Este es bueno, es uno de los nuestros”. Ese dicho fue tomado por los medios italianos y españoles para marcar el agrado que tendría el capitán de Argentina para tenerlo en el equipo nacional y en el catalán, también.
"¿Si quiero enfrentarme a Messi? No, yo tengo ganas de jugar con él", afirmó Dybala.
“Creo que cuando ‘Leo’ Messi se refirió a mí era en relación a la selección argentina. Se dijo que se lo había dicho al ‘Tata’ Martino. Si es así, que siente una admiración por mí, es de agradecer. ¿Si quiero enfrentarme a Messi? No, yo tengo ganas de jugar con él”, afirmó Dybala.
Messi ya había sido muy elogioso con las condiciones de Dybala en una entrevista. “Es un gran jugador, con mucho futuro. Seguro que dará mucho que hablar en los próximos años”, dijo “Leo” antes que explote Paulo en la Juventus.
Estando en Palermo, antes de pasar a la “Vecchia Signora”, Dybala había dicho: “Sería capaz de ir al Barcelona nadando para jugar con él”. En clara referencia a la admiración que siente Paulo por Messi. Parece que el destino, y su gran presente, cumplirán su sueño.
Lejos del ruido
“Ahora, mi mayor preocupación es ayudar al equipo a que pueda lograr su quinto Scudetto consecutivo”, paró la pelota Dybala ante la insistencia de la prensa sobre su posible futuro en Barcelona. Con la misma claridad que se mueve en el campo de juego se maneja frente a los micrófonos.
Paulo, con apenas 22 años, no se mareó. Sigue siendo ese chico que dejó su Laguna Larga natal para internarse en la pensión de Instituto y formarse como futbolista. Ese que hoy disfrutan los hinchas de Juventus, antes lo hicieron los de Palermo o los de la Gloria.
Como lo dijo el presidente de “la Juve”, Dybala no tiene precio. Ni techo. El delantero demuestra partido a partido que supera sus actuaciones anteriores. Llegó al club turinés para reemplazar a Tevez y superó las expectativas de muchos. Heredó la camiseta número “21” que había dejado el legendario Andrea Pirlo y se hizo cargo de cada pelota parada que tiene el equipo. Patea los córners, los tiro s libres y hasta los penales. Es todo un referente en un equipo que viene de salir campeón de la Liga por cuarto año consecutivo.
Se metió de lleno en un vestuario cargado de figuras y está a la altura. Paulo no tiene ni precio ni techo. Sólo piensa en jugar al fútbol. Y es lo mejor que puede hacer. Así se supera día a día.
FUENTE: (http://mundod.lavoz.com.ar) - FOTO: (AP).-
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