El presidente de Estudiantes, Alicio Dagatti explicó que el no haber ascendido fue determinante para la desvinculación del entrenador."El vínculo con Hugo Mattea terminó el día que perdímos con Defensores, lo que hacemos ahora es decidir que no continúe el año que viene”, sentenció el presidente de Estudiantes, Alicio Dagatti, en dialogo con PUNTAL, sobre la situación del ahora ex entrenador de Estudiantes. Además, no descartó ofrecerle el cargo de coordinador de divisiones infanto juveniles. Sobre su reemplazante, explicó que el martes o miércoles de la semana que viene estaría definido y admitió que podría ser alguien del fútbol local.-
Fin del ciclo
Ayer por la mañana la dirigencia de Estudiantes y Hugo Mattea decidieron de común acuerdo, no renovar el vínculo del entrenador para el Torneo Federal B 2016. El presidente del club Alicio Dagatti, explicó que luego de una reunión muy intensa entre ambas partes. se llegó a la determinación.
“El no haber logrado el ascenso fue un golpe muy duro y eso fue casi determinante. Además, estamos buscando un esquema un poco mas ofensivo”, manifestó el presidente sobre las razones de la no continuidad. Asimismo, aclaro que no se arrepiente de haberlo contratado para esta temporada. “Yo no me arrepiento de nada de lo hago, porque lo hago convencido”, remarcó Dagatti.
Por otro lado, explicó que las puertas del club están abiertas para Mattea y que se podría producir una nueva reunión para ofrecerle un cargo en el fútbol infanto juvenil. “Nos interesaría que trabaje en el predio Pablo Aimar, nos parece que es un nombre que puede sumar en ese sentido al proyecto que tenemos como club”, especificó el mandatario.
Por su parte, Mattea eligió el silencio hasta que pasen algunos días y recién después de analizar bien algunas cuestiones tomará contacto con la prensa para hacer una evaluación de lo que fue este nuevo paso por Estudiantes.-
Parciales buenos, pésimo final
El nuevo paso de Hugo Mattea por Estudiantes dejó un muy buen porcentaje de pubntos obtenidos. En total sacó casi el 60% de los puntos que puso en disputa. Jugó 28 partidos, de los cuales ganó 13, empató 11 y solo perdió 4. El equipo hizo del Antonio Candini una verdadera fortaleza, en la que perdió un partido, curiosamente ese único encuentro que terminó en derrota fue el que costó la eliminación.
Con estos números, para nada despreciables, es difícil entender porque la suerte del entrenador parecía echada desde hace tiempo, incluso desde antes de la eliminación. Pero si uno analiza algunas cuestiones, uno puede encontrar las respuestas.
“Me gustan los procesos a largo plazo”, dijo Mattea en la conferencia de prensa de su asunción y señaló que el sentía una consonancia con lo que quería la actual dirigencia. Si bien esto en parte tenía gran parte de verdad, lo que no estaban totalmente claros eran los roles y, sobre todo, quien era el que iba a conducir la maquinaria del proceso. El técnico quería tener control total sobre el fútbol de Estudiantes, intentando generar un estilo similar al de Belgrano de Córdoba, club desde el cual arribaba.
El presidente del club también tenía sus planes y si bien apostaba a un modelo a largo plazo, necesitaba del espaldarazo de los resultados, para afianzar su posición como mandatario en lo deportivo.
Así las cosas, empezaron los problemas a la hora de conciliar los objetivos de cada una de las partes y el idilio inicial se terminó rápido. Justo antes de comenzar la pretemporada para el Torneo Federal B.
“Son todos japoneses”, aclaró Mattea cuando empezaron allegar los nombres de peso traídos por los dirigentes. El entrenador quería hacer base en jugadores del club y en sus hombres de confianza, mientras que desde la dirigencia veían un plantel al que le faltaban figuras de renombre que atrajeran a la gente y que jerarquizaran el conjunto. En definitiva, la dirigencia fue en busca de los dueños de las marquesinas, los que se llevan todas las luces.
El entrenador, siempre con su idea fija, tuvo cierto recelo de la llegada de esos nombres y siguió apostando a los suyos. Esa diferencia de criterios desquebrajó totalmente la relación existente y hasta hubo amagues de renuncias y rumores de discusiones.
“No todo es tan malo como s elo quiere hacer ver”, disparó Mattea cuando terminó la primera fase, respecto de las críticas que recibía el equipo sobre su juego. Estudiantes sumaba y obtenia resultados, pero el equipo no parecía generar confianza y la gente lo acompañaba poco.
De hecho, su arquero, Adrián peralta, era la gran figura en casi todos los partidos solucionando los problemas de una defensa que nunca encontró una línea de rendimiento correcta. La mitad de la cancha nunca tuvo grandes partidos y, si tomamos esto en cuenta, la eliminación no fue tan sorpresiva. Bastó que sus dos mejores hombres (Colazo y Peralta) tuvieran infortunios, para que el equipo se quedar afuera.
Raro como es el fútbol, el mismo resultadismo que lo hizo llegar hasta los cruces decisivos, fue el que lo terminó condenando. Sumó mucho pero su rendimiento no convenció y cuando la gente se entusiasmó, el éxito lo abandonó y le dijo adiós al Federal B.
La desvinculación de ayer fue la firma final de una carta que se venía redactando hace mucho tiempo atrás. Así se resume este paso de Hugo Mattea por su querido Estudiantes. Un proceso al que quizás le faltó tiempo, pero que tuvo demasiadas complicaciones.
FUENTE: (Agustín Hurtado) - (http://www.puntal.com.ar) - FOTO: (Marcelo de la Torre/Archivo).-
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