Tras la decisión de que el ciclo de Darío Bringas llegara a su fin, la dirigencia de Juventud Unida se movió rápido y en menos de 24 horas designó a su reemplazante. Julio Turello fue el elegido y ayer dirigió su primera práctica.
“Me encontré con un plantel con ganas, muy predispuesto a salir adelante y responsabilizándose de la situación”, comentó el alejandrino, quien hasta hace un mes estuvo dirigiendo la séptima división de Belgrano de Córdoba que participa en el torneo de AFA.
Turello expresó que el arreglo es por los cuatro partidos que restan para el final de la etapa clasificatoria del torneo Federal B. “Fue un pedido mío. Queda la puerta abierta para después volver a hablar para definir cómo se sigue. Ver si les gusta mi trabajo y desde allí tomar una decisión, de las dos partes”, explicó.
“Me llamó Julio (Titarelli) el lunes y me preguntó si me interesaba, ya que buscaba a alguien que no estuviera trabajando. Fue todo muy rápido. Me explicó que se hizo lo posible para que Manzana (Darío Bringas) siguiera, pero lamentablemente las últimas goleadas terminaron decidiendo. Es una lástima porque si el equipo rescataba un punto en Peñarol hoy no estaría acá. Hubiese sido lo ideal que él siguiera, es buena gente, pero se hizo difícil mantenerlo”, contó.
“Me encontré con un plantel con ganas, muy predispuesto a salir adelante y responsabilizándose de la situación”, comentó el alejandrino, quien hasta hace un mes estuvo dirigiendo la séptima división de Belgrano de Córdoba que participa en el torneo de AFA.
Turello expresó que el arreglo es por los cuatro partidos que restan para el final de la etapa clasificatoria del torneo Federal B. “Fue un pedido mío. Queda la puerta abierta para después volver a hablar para definir cómo se sigue. Ver si les gusta mi trabajo y desde allí tomar una decisión, de las dos partes”, explicó.
“Me llamó Julio (Titarelli) el lunes y me preguntó si me interesaba, ya que buscaba a alguien que no estuviera trabajando. Fue todo muy rápido. Me explicó que se hizo lo posible para que Manzana (Darío Bringas) siguiera, pero lamentablemente las últimas goleadas terminaron decidiendo. Es una lástima porque si el equipo rescataba un punto en Peñarol hoy no estaría acá. Hubiese sido lo ideal que él siguiera, es buena gente, pero se hizo difícil mantenerlo”, contó.
- ¿Por qué aceptó el desafío?
- Entiendo la situación en la que está el club. Te ponés a mirar y, más allá de que hay cinco equipos en la misma situación, por los últimos resultados se puede decir que Juventud es el más complicado. Acepté porque me parece que hay un buen plantel, más allá del nivel que tenga ahora. El desafío es en dos semanas levantar el nivel, la confianza de ellos. Además a Julio (Titarelli) lo conocía del fútbol y que esté Pablo (Garraza) ayudó. Si no hubiese conocido a nadie, hubiese dicho que no.
- ¿Con qué se encontró?
- Con un plantel muy predispuesto. De hecho hicimos un trabajo de alta intensidad y el grupo que trabajó conmigo se mostró muy predispuesto, muy consciente de la situación. Eso es bueno porque están comprometidos y responsabilizándose de la situación. Eso es clave. Un plantel que tiene confianza de que lo van a sacar adelante, a revertir este difícil momento. Es un plantel con jugadores de jerarquía que por esas cosas están en un clima emocional raro. Pero con convencimiento y decisión se puede hacer un buen cierre de torneo.
- ¿En qué aspectos va a hacer mayor hincapié?
- Vamos a trabajar en todos los aspectos. Hay que hacer un rearmado de la defensa porque González está lesionado y Negro fue expulsado. Vamos a buscar las variantes y le vamos a dar el toque que uno cree puede ser lo mejor de acuerdo con la características de los jugadores. Intentaremos hacer un juego sólido, no vistoso. Bajar los goles en contra. Hay que hacer un equipo sólido, que no se va vulnerable cuando le lleguen. También trabajar en la confianza para que se sientan enteros para salir a jugar, porque cuando uno tiene dudas no se puede tomar decisiones correctas.
- Está claro cuál es el objetivo, ¿cuántos puntos considera que serán necesarios para conseguirlo?
- El objetivo es sumar. Uno es consciente de que hay que sacar buenos resultados. Hay que ser sólidos, compactos y agresivo a la hora de lastimar el arco rival. No sé con cuántos toques vamos a llegar, si con diez o uno. Con respecto a los puntos es relativo. Por ahí los porcentajes estadísticos dice que la mayoría de los equipos está por debajo del cuarenta por ciento de efectividad. Entonces se podría decir que con cinco, de los doce que faltan, estaríamos. Lo bueno es que dependemos de nosotros. Con el cincuenta por ciento de los puntos estaríamos tranquilos, no es poco, pero con confianza se puede conseguir.
- Si aceptó el desafío es porque conoce el torneo con el que se va a encontrar...
- Al torneo lo estaba siguiendo. Cuando estaba en Córdoba fui a ver a Racing. A los equipos de Río Cuarto los vi a todos en distintos partidos. Es un torneo, en el que más allá de Sarmiento y Racing que están cortados, en el que la diferencia entre los equipos depende de los arrebatos anímicos, que metés un par de triunfos y salís. Le pasó en su momento a Banda Norte, le pasó a Las Palmas y ahora a Peñarol, que cambió de técnico y volvió a ganar. Los que están más fuerte de la cabeza se animan, toman decisiones y eso hace las pequeñas diferencias.
- Entiendo la situación en la que está el club. Te ponés a mirar y, más allá de que hay cinco equipos en la misma situación, por los últimos resultados se puede decir que Juventud es el más complicado. Acepté porque me parece que hay un buen plantel, más allá del nivel que tenga ahora. El desafío es en dos semanas levantar el nivel, la confianza de ellos. Además a Julio (Titarelli) lo conocía del fútbol y que esté Pablo (Garraza) ayudó. Si no hubiese conocido a nadie, hubiese dicho que no.
- ¿Con qué se encontró?
- Con un plantel muy predispuesto. De hecho hicimos un trabajo de alta intensidad y el grupo que trabajó conmigo se mostró muy predispuesto, muy consciente de la situación. Eso es bueno porque están comprometidos y responsabilizándose de la situación. Eso es clave. Un plantel que tiene confianza de que lo van a sacar adelante, a revertir este difícil momento. Es un plantel con jugadores de jerarquía que por esas cosas están en un clima emocional raro. Pero con convencimiento y decisión se puede hacer un buen cierre de torneo.
- ¿En qué aspectos va a hacer mayor hincapié?
- Vamos a trabajar en todos los aspectos. Hay que hacer un rearmado de la defensa porque González está lesionado y Negro fue expulsado. Vamos a buscar las variantes y le vamos a dar el toque que uno cree puede ser lo mejor de acuerdo con la características de los jugadores. Intentaremos hacer un juego sólido, no vistoso. Bajar los goles en contra. Hay que hacer un equipo sólido, que no se va vulnerable cuando le lleguen. También trabajar en la confianza para que se sientan enteros para salir a jugar, porque cuando uno tiene dudas no se puede tomar decisiones correctas.
- Está claro cuál es el objetivo, ¿cuántos puntos considera que serán necesarios para conseguirlo?
- El objetivo es sumar. Uno es consciente de que hay que sacar buenos resultados. Hay que ser sólidos, compactos y agresivo a la hora de lastimar el arco rival. No sé con cuántos toques vamos a llegar, si con diez o uno. Con respecto a los puntos es relativo. Por ahí los porcentajes estadísticos dice que la mayoría de los equipos está por debajo del cuarenta por ciento de efectividad. Entonces se podría decir que con cinco, de los doce que faltan, estaríamos. Lo bueno es que dependemos de nosotros. Con el cincuenta por ciento de los puntos estaríamos tranquilos, no es poco, pero con confianza se puede conseguir.
- Si aceptó el desafío es porque conoce el torneo con el que se va a encontrar...
- Al torneo lo estaba siguiendo. Cuando estaba en Córdoba fui a ver a Racing. A los equipos de Río Cuarto los vi a todos en distintos partidos. Es un torneo, en el que más allá de Sarmiento y Racing que están cortados, en el que la diferencia entre los equipos depende de los arrebatos anímicos, que metés un par de triunfos y salís. Le pasó en su momento a Banda Norte, le pasó a Las Palmas y ahora a Peñarol, que cambió de técnico y volvió a ganar. Los que están más fuerte de la cabeza se animan, toman decisiones y eso hace las pequeñas diferencias.
FUENTE: ( José Luis Debernardi) - (http://www.puntal.com.ar) - FOTO: (Marcelo de la Torre/Archivo).-
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