Pueblo nativo del estado de Chihuahua en la cima de la sierra Madre Oriental azteca, su nombre significa pies ligeros tal como ella lo demostró sin utilizar zapatillas de running, indumentaria de atletismo ni accesorios deportivos. Integrante de la comunidad indígenea tarahumara o rarámuri, la joven mexicana María Lorena Ramírez ganó con sandalias de goma y pollera la prueba Ultra Trail Cerro Rojo en la localidad de Puebla gracias a correr 55 kilómetros en 7h29m a través de un circuito de montaña con 3.000 metros de desnivel positivo.
Primera de la clasificación general femenina de esta segunda edición que reunió a quinientos competidores provenientes de una docena de naciones, María Lorena Ramírez de veintidós años participó con su vestimenta típica -una falda recta bien larga por debajo de las rodillas, ojotas de caucho y pañuelo al cuello- sin utilizar gafas de sol, calzado técnico, geles ni barras energéticas.
Ganadora de un premio en efectivo de casi trescientos euros, María Lorena Ramírez es una trabajadora rural que camina un promedio de trece kilómetros diarios por el monte arriando ganado.
A nivel deportivo, la temporada pasada se coronó subcampeona del Ultramaratón Caballo Blanco donde fue la segunda mujer más veloz en completar los cien kilómetros.
Su hermano mayor arribó décimosexto de la clasificación general en Puebla ratificando el talento natural para el atletismo de larga distancia de los miembros de la comunidad indígena Rarámuri que el periodista estadounidense Christopher McDougall reflejó en su libro Nacidos para Correr.
También sin zapatillas de running, la semana pasada el adolescente estadounidense Benjamín Pachev de dieciocho años corrió con sandalias Crocs el Medio Maratón de Indianápolis completando los 21K en 1 hora, 11 minutos y 53 segundos que le valieron el 16º puesto de la clasificación general absoluta.
Como antecedente no tan lejano, en noviembre de 2012, su compatriota Keith Levasseur corrió los 42 kilómetros del maratón de Baltimore en ojotas, batiendo el récord mundial de esta disciplina en sandalias gracias a cronometrar 2 horas, 46 minutos y 58 segundo , un tiempo que pocos elegidos pueden realizar usando zapatillas.
FUENTE: (http://www.eldepornauta.com.ar).-
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