Se puede practicar todo el año en pileta, ofrece la variante de las aguas abiertas, es una disciplina clave en los Juegos Olímpicos, combate las dolencias del sedentarismo como la fibromialgia y también es ideal para la formación infanto juvenil. Fruto de un estudio elaborado durante más de un lustro, la Organización Mundial de la Salud OMS determinó que la natación es el mejor deporte para el desarrollo de niños y adolescentes porque se ejercitan todos los grupos musculares sin riesgos de lesiones.A través de cualquiera de sus cuatro estilos crol, pecho, espalda y mariposa, la natación ejercita tanto la totalidad de los músculos como la coordinación motora junto al sistema respiratorio y circulatorio.
Además de constituir un seguro de vida dado que evita las muertes por ahogamiento, la natación incrementa la autoconfianza e independencia de los niños.
En condiciones adecuadas como una pileta con una temperatura no inferior a 32 grados, agua en condiciones de salubridad y con un método sistemático a cargo de un docente especializado, la natación es la actividad física más recomendable para los bebés y la primera infancia.
Aún en menores de un año, la natación aporta idénticos beneficios como una mejora cardiorrespiratoria, corrección de la alineación postural e incrementa la coordinación muscular desarrollando las habilidades sensoriales y psicomotrices como gatear o caminar.
La combinación de ejercicios suaves con el agua templada, relajarán al bebé estimulando su apetito.
Así también se lo inducirá a dormirse sin problemas ni despertarse durante la noche, favoreciendo el descanso necesario a tan temprana edad.-
La natación es ideal en la adolescencia e infancia
Estudios médicos coinciden con las estadísticas a nivel global, el 80% de los niños con exceso de peso serán obesos en su etapa de adultos.
La natación es eficaz para bajar de peso como controlarlo sin engordar. Al igual que en toda otra actividad física, las calorías quemadas durante el ejercicio son proporcionales a la intensidad del entrenamiento.
Cada diez minutos ininterrumpidos nadando crol se quemarán unas 100 calorías mientras el estilo pecho o espalda quemarán unas 70. Por ser la modalidad que demanda un mayor consumo de oxígeno, diez minutos de mariposa queman 150 calorías.
Al mismo tiempo, mantiene bajos niveles de tensión arterial, disminuye el colesterol en sangre y previene el desarrollo de la arteriosclerosis desde la infancia.
En los niños o jóvenes diabéticos, la natación disminuye el grado de glucosa en sangre reduciendo la necesidad de insulina.
Quienes integran un equipo federado o entrenan un mínimo de dos a tres veces por semana en la pileta, logran una mejor respuesta cardiovascular, mayor flexibilidad, agilidad, coordinación, fuerza y velocidad en comparación con chicos sedentarios de su misma edad.
Considerado como un deporte apto para todas las edades y niveles competitivos, aquellos niños con patologías neurológicas, dificultades motrices e incluso parálisis cerebral tienen a la pileta como su lugar en el mundo.
Su estado de tensión se tornará de relajación muscular ni bien entren en contacto con el agua, además de lograr progresos físicos, psíquicos y anímicos.
Como si fuera poco, un equipo interdisciplinario de profesionales de la salud de la brasilera Universidad de San Pablo constató que la natación ayuda a pacientes que sufren fibromialgia, una enfermedad que produce fatiga con dolores musculares en el cuello, espalda, caderas, brazos y piernas.-
FUENTE: (http://www.eldepornauta.com.ar).-
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