En un duelo generacional, Williams, de 34 años, perdió la oportunidad de igualar los 22 torneos de Grand Slam de la alemana Steffi Graf, mientras que Muguruza ingresa en la ilustre lista de ganadoras de un grande. Si hace un año en la final de Wimbledon, la joven pagó ante Serena el peaje de su primer partido por el título, esta vez demostró que tiene el punto de madurez para ser la heredera de la reina del circuito en la última década.
Serena había arrasado en 2015 al ganar los primeros tres Grand Slam pero a partir de ahí, los tres siguentes le fueron esquivos. De hecho, en 2016 también alcanzó la final en Australia pero cayó ante la alemana Angelique Kerber y con esta nueva derrota, el récord deberá esperar. Sin embargo, aunque está acostumbrada a ganar, Williams no pensó dos veces para elogiar a su rival: "Tiene un futuro brillante, obviamente. Sabe cómo jugar en los grandes escenarios y claramente sabe cómo ganar Grand Slams". Y sin poner excusas, concluyó: "Lo único que puedo hacer es seguir intentándolo. En Australia, Kerber hizo 16 errores en tres sets. ¿Qué se puede hacer ante eso? Y hoy Garbiñe jugó increíble".
FUENTE: (http://www.ole.com.ar).-
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