Luego de perder el invicto ante Huracán Las Heras en Mendoza, Estudiantes tendrá dos semanas para reencontrarse con el funcionamiento que lo llevó a ser el líder en soledad de la zona 8Estudiantes perdió el domingo en su visita a Huracán Las Heras y resignó su invicto, aunque no la punta, en la zona 8.
La derrota ante el Globo Lasherino no dejó buenas sensaciones, no por el resultado en sí ya que está claro que no se puede ganar siempre, sino porque se vieron algunos problemas estructurales en el funcionamiento del equipo que hasta aquí eran desconocidos.
Uno puede tener una mala tarde y que no le salgan las cosas como las planeó, pero en este caso esa merma futbolística viene de la mano con el cambio de nombres (y hasta de sistema) con el que venía jugando Vázquez hasta aquí.
Ya ante Argentino de Mendoza la fecha pasada se había visto una modificación en el planteo aunque, entendiendo el partido, el entrenador ya había avisado que iba a mostrar una cosa totalmente distinta a las tres primeras presentaciones, en las cuales había sumado los 9 puntos en disputa.
Ante Huracán la defensa fue lo más flojo del equipo, con muchos cambios posicionales (Foglia de central por derecha, corriendo a Sesma a la izquierda y Palandri al lugar de 3), lo que terminó rompiendo una de las grandes cualidades del Celeste en este proceso: la solidez en el fondo.
Algo parecido pasó en la mitad de la cancha con los tres cincos (Barreto, Imbesi y Aimar, aunque por momentos el Nane se paró de enganche), esto obligó a Comba a jugar más adelantado por derecha, pero sin terminar de ser el acompañante de Sánchez (por momento parecía un “loco malo” aislado arriba).
Aquí parte el gran problema que evidenció el Celeste en los dos últimos partidos, perdió el sello distintivo que había mostrado en el comienzo, los dos extremos que lastimaban en cada jugada.
Si bien Comba estaba “tocado” ante Argentino (ingresó rápidamente por la lesión de Puñet), el domingo volvió a compartir cancha con Flordelmundo, pero esa laguna posicional le quitó protagonismo.
Lo del Mellizo es un caso aparte, ante Huracán estaba siendo junto con Aimar el jugador “distinto”, e inexplicablemente fue reemplazado en el entretiempo.
Estudiantes tendrá fecha libre y podrá trabajar dos semanas para recuperar el funcionamiento que lo llevó a cosechar las tres primeras victorias, colchón de puntos que hoy lo mantiene en la punta de la zona 8.
Para poder regresar a las fuentes será vital la recuperación de Naim Ayelo, ya que tanto Elías Scoponi ante Argentino y Juan Palandri ante Huracán no tuvieron un buen rendimiento, lo que sumado a la lesión de Puñet (el otro que puede jugar por ese sector) hizo que se extrañara de sobremanera al “Turco”.
También habrá que esperar por la evolución de Sebastián Coria, alguien que sin tener actuaciones descollantes se mostró como un socio ideal para Aimar.
Estudiantes reveló que puede jugar mucho mejor que ante Huracán y seguramente volverá en el próximo partido (Jorge Newbery de local) a demostrar que es un firme candidato al ascenso.
FUENTE: (Tristán Amado) - (http://www.puntal.com.ar) - FOTO: (Marcelo de la Torre/Archivo).-
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