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sábado, 23 de julio de 2016

MAS DEPORTES: El primer Jefe de Deportes - FUENTE: (Carlos Alberto Valduvino) - (http://www.puntal.com.ar).-

A los 77 años falleció en Río Cuarto Miguel Ángel Musto. Fue uno de los periodistas fundadores de diario PUNTAL. Desde 1960 estuvo ligado a la radio y a la gráfica
El primer contacto que tuve con Miguel Ángel Musto, alguna vez se lo pude contar, fue en 1974, cuando se jugaba el Mundial de Alemania, y él era el enviado especial de Radio Ranquel. Fue escuchando la AM 1010, esperábamos en el pueblo “la salida al aire”.
Cuando me incorporé a diario PUNTAL, allá por febrero de 1985 para comenzar a formar parte de los “volantes de deportes”, lo conocí personalmente y pude desarrollar junto con él, José María Ortiz, Osvaldo Benmerghi, Ángel Ludueña, Juan José Erausquin, Guiyesol y los corresponsales de toda la región una parte de la historia de este periódico.
Junto con José María Ortiz, formó una dupla memorable en Radio Ranquel y en diario PUNTAL.
En el periodismo deportivo comenzó a trabajar en el diario El Pregón, pero para esa época ya estaba en los medios porque era uno de los locutores de Radio Ranquel, en la cual había comenzado a trabajar en 1960.
Durante 10 años hasta 1995 compartimos la redacción de diario PUNTAL, ahora debemos decir allá en la sede de Rivadavia 180, justo el mismo edificio donde había permanecido en un tiempo la AM 1010, Radio Ranquel.
De extrema rectitud a la hora del manejo del idioma y la escritura, defendió hasta la última charla que mantuve con él la belleza estética del juego en el fútbol. Esto fue el año pasado cuando en el Día del Periodista Deportivo en la sede del gobierno provincial se realizaron distinciones a Miguel quien estuvo acompañado por su hija Verónica, a Jorge Alejandro Cárdenas y a Mario Palacio.
En radio, siempre manejó el guión para no salirse de un libreto preestablecido.
Lo último que pudimos compartir en Radio -1987- fue la campaña de Asociación Atlética Estudiantes en el ya desaparecido torneo del Interior, cuando quedó eliminado con Villa Dálmine en la instancia semifinal aquel equipo que dirigió José Manuel Vázquez.
Enfrente en el Violeta estaban, entre otros, el “Gringo” Scotta, Víctor Crema y Alberto Salvaggio, estos dos últimos después pasaron a la entidad celeste. Fue derrota de visitante por 2 a 1 y empate de local 0 a 0. En ese cotejo que dirigió Guillermo Marconi debió salir corriendo del rectángulo, y se produjeron varios incidentes dentro y fuera de la cancha. Cuando llegamos a la redacción, había que escribir sobre los episodios que se produjeron al final.
Allí en zona de vestuarios había estado cubriendo para hacer notas del final, como todo “novato” de redacción.
Hasta el día de hoy lo llevo como enseñanza. “Lo que vio es lo que debe cronicar, y las fotos lo van a acompañar”.
Amante de la música de tango, locutor recibido en el ISSER con la calificación más alta y felicitaciones, volvió a ser la voz de la música popular argentina por excelencia, en sus últimos años en los que pasó por el aire de Radio Sudamericana, FM Energía y FM Río.
Ayer en el mismo horario las 17.30 en el que debía estar en el aire para hablar del comienzo del Festival Nacional del Tango que se inició anoche en La Falda, Miguel Ángel Musto pasó a ser parte de la historia grande del periodismo gráfico y radial de Río Cuarto y el sur de Córdoba.
La corrección y la mesura en sus comentarios fueron una constante. Leer y conocer lo que debíamos ir a cronicar o cubrir era una enseñanza que siempre inculcaba. Fue junto con José María Ortiz uno de los “maestros” que tuvimos los jóvenes en los inicios de la redacción deportes.
Apegado a la familia, a las cosas simples, maestro de profesión y vocación, cursó Abogacía en la Universidad Nacional de Córdoba, trabajó como empleado en el Banco Español, en la Municipalidad de Río Cuarto, pasó por Radio Ranquel, Radio Río Cuarto, fue uno de los periodistas fundadores de diario PUNTAL, para en 1995 retornar a su primer amor: la locución y la radio para dialogar con los tangueros.
Es el momento de la despedida. En sus hijas Mariana, Verónica, Fernanda, sus nietos y María Luisa, la compañera de toda su vida, queda el recuerdo de más de 57 años entregados a ser un trabajador de la comunicación.
Esta crónica no puede ser de un adiós. Es el reconocimiento a una persona que le escribió y le contó a una buena parte de la población del Sur de Córdoba cómo se construía el deporte en esta parte del país.
FUENTE: (Carlos Alberto Valduvino) - (http://www.puntal.com.ar).-

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