Como en la cancha y en las tribunas, en los bancos de suplentes se vieron dos caras opuestas. A la superioridad de Gimnasia en el 2-0 sobre Instituto y a la fiesta del ascenso de los hinchas triperos contrastado con el dolor de los albirrojos, se les suma el gozo por el éxito de Pedro Troglio y la bronca y la incertidumbre de Frank Darío Kudelka.
“Que de la mano, de Pedro Troglio; todos la vuelta vamos a dar”, “olé, olé, olé, olé; Pedro, Pedro”, recibía el DT visitante. Y si bien no es cuestionado ni recibe insultos, Kudelka está en las antípodas de su colega, por el presente de la Gloria.
Primero se mostró molesto con sus jugadores: “A las derrotas hay que venderlas caras. La actitud, la concentración, la atención... No se pueden negociar esas cosas en el fútbol. Uno puede jugar mejor o peor que el rival e indudablemente que enfrentamos a un equipo que es más rico técnicamente que nosotros. Pero cuando existe un factor anímico, atencional y actitudinal, se puede equiparar medianamente o al menos intentarlo. Y no lo hicimos”.
A la dureza de su discurso se le sumó el dolor por la celebración ajena. “Estoy con mucha bronca. No vine a ser el invitado de la fiesta. A mi laburo lo defiendo actuando y esforzándome. Después, si el rival es superior a mí, hay que respetarlo y aplaudirlo”, afirmó.
Y Kudelka fue más allá sobre la realidad: “Nada es casual. Una campaña tan triste como esta no es casual. Hay veces que las palabras están de más”.
“Estamos siendo partícipes de una campaña tristísima. Para que no pasen las cosas de esta campaña, no hay que repetir errores. No echo culpas, por eso digo que estoy en medio de una campaña. Me preocupa que es un equipo que cuando juega bien y merece ganar, que fueron muchas veces, ganó pocos; y los que tiene que perder, los pierde”, agregó el DT.
Sobre su continuidad, señaló: “Estamos recién iniciando un tiempo de negociación. Si hay convencimiento de ambas partes, se suele llegar a un acuerdo. Hay cosas irrenunciables. En lo que a mí respecta, será la conformación del equipo. No va a haber problema en la parte salarial. Tenemos que estar unidos y convencidos de qué tipo de equipo queremos armar. Ahí diré si estoy para seguir o no”.
–¿Y qué equipo quiere armar?
–No lo sé, yo no soy directivo. Por las charlas preliminares que tuve, se me ocurre que querrán armar el mejor equipo. No tengo dudas de eso, pero después falta la concreción, las posibilidades y en eso entra el aspecto económico y a eso no lo manejo yo.-
FUENTE: (http://mundod.lavoz.com.ar) - FOTO: (Sergio Cejas).-
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