“Si bien ya pasaron varios días del ascenso a la B Nacional, la sensación dura. La gente te lo hace sentir a cada momento. Vinimos para esto y lo disfruto. Estamos cayendo de ese logro. Pero también es cierto que aún no terminó la temporada y vamos hacia otra final. Si bien se vive ese ambiente de ascenso, pero todos ya pensamos en esa gran noche con la Lepra”, dijo Aguiar.
–¿Viste a Newell’s ante Boca?–Uno vive de esto y después del cruce con Sportivo Belgrano ya empecé a estudiar a Newell’s. Es “el” equipo argentino. Pelea en tres frentes, rotando jugadores, pero con estilo. Como la “T”, en dos frentes.
–¿Newells, con un mix o pleno?
–Más allá de eso y conociendo el nivel de Newell’s caigo en una frase reiterativa del Argentino A: “Talleres depende de Talleres”. Estando bien puede hacerle frente a cualquiera. Trabajamos para eso. Para mantener todo lo bueno que se hizo en el año y para equivocarnos lo menos posible. Porque un rival de la jerarquía de Newell’s, te factura el más mínimo error.
–Más allá de eso y conociendo el nivel de Newell’s caigo en una frase reiterativa del Argentino A: “Talleres depende de Talleres”. Estando bien puede hacerle frente a cualquiera. Trabajamos para eso. Para mantener todo lo bueno que se hizo en el año y para equivocarnos lo menos posible. Porque un rival de la jerarquía de Newell’s, te factura el más mínimo error.
–¿Tu historia con el ascenso tiene un valor agregado?
–Sí. Unos días antes nació Tomás, mi segundo hijo. También venía recuperándome de una operación de cálculos renales. Casi la olvidé. Pero en su momento no lo podía creer. Fue todo muy rápido. Pero todo estuvo del lado de Talleres. Al estar ausente un tiempo, el equipo salió adelante. Estaba ansioso afuera, pero tranquilo por que mis compañeros no iban a sentir nada. Por la rotación que mantuvo “Cacho” y el gran nivel de los jugadores. Es el logro más importante que he tenido. Fue especial.
–Sí. Unos días antes nació Tomás, mi segundo hijo. También venía recuperándome de una operación de cálculos renales. Casi la olvidé. Pero en su momento no lo podía creer. Fue todo muy rápido. Pero todo estuvo del lado de Talleres. Al estar ausente un tiempo, el equipo salió adelante. Estaba ansioso afuera, pero tranquilo por que mis compañeros no iban a sentir nada. Por la rotación que mantuvo “Cacho” y el gran nivel de los jugadores. Es el logro más importante que he tenido. Fue especial.
–¿Salió el Aguiar que querías?
–En ese primer partido con Sportivo, me fue fácil decir que ese no era el Aguiar que había contratado Talleres porque con el mínimo esfuerzo al siguiente partido lo iba a superar. Estuve tranquilo. Estoy muy agradecido a Sialle que me bancó. Este club la tolerancia para con las incorporaciones iba a ser cero. Sialle confió en uno. Es invalorable. Sobre todo en este club. Al mínimo error todo se cuestiona muchísimo. Todo se agranda. Antes de llegar a Talleres sabía que podía estar a la altura y cargar con el peso del arco de Talleres. Venía con regularidad importante y madurez. Sabía como se trabajaba acá. Nos dieron todo. Desde el preparador de arqueros al utilero. Contra Belgrano me preguntaron si era una especie de revancha. Y el fútbol no las tiene. Jugaste y uno aprende de los errores. Podés enfrentar al mismo rival, pero siempre será distinto. Me dio bronca aquel partido por como se abrió, ese error y los de Sportivo. Nunca lo tomé como que vendría una revancha. Las cosas se pueden dar, como no. Hay buenas y malas, y en Talleres las buenas fueron grandes y tapa quizás las malas que uno tuvo en su carrera.
–En ese primer partido con Sportivo, me fue fácil decir que ese no era el Aguiar que había contratado Talleres porque con el mínimo esfuerzo al siguiente partido lo iba a superar. Estuve tranquilo. Estoy muy agradecido a Sialle que me bancó. Este club la tolerancia para con las incorporaciones iba a ser cero. Sialle confió en uno. Es invalorable. Sobre todo en este club. Al mínimo error todo se cuestiona muchísimo. Todo se agranda. Antes de llegar a Talleres sabía que podía estar a la altura y cargar con el peso del arco de Talleres. Venía con regularidad importante y madurez. Sabía como se trabajaba acá. Nos dieron todo. Desde el preparador de arqueros al utilero. Contra Belgrano me preguntaron si era una especie de revancha. Y el fútbol no las tiene. Jugaste y uno aprende de los errores. Podés enfrentar al mismo rival, pero siempre será distinto. Me dio bronca aquel partido por como se abrió, ese error y los de Sportivo. Nunca lo tomé como que vendría una revancha. Las cosas se pueden dar, como no. Hay buenas y malas, y en Talleres las buenas fueron grandes y tapa quizás las malas que uno tuvo en su carrera.
–¿Le pagaste algo a Irusta?
–Es un grande “el Mono”, en la definición por penales me pasó el papelito. Acertó en todos los de Sportivo y a Aróstegui le adiviné. Laburó bien. A Sportivo también le habían dado muchos penales.
–Es un grande “el Mono”, en la definición por penales me pasó el papelito. Acertó en todos los de Sportivo y a Aróstegui le adiviné. Laburó bien. A Sportivo también le habían dado muchos penales.
–¿Seguís?
–Siempre que voy a un club, quiero quedarme. Por mi familia, sobre todo. Era y es mi intención acá. La de seguir en Talleres. Se verá cuando se reúnan las partes.
–Siempre que voy a un club, quiero quedarme. Por mi familia, sobre todo. Era y es mi intención acá. La de seguir en Talleres. Se verá cuando se reúnan las partes.
Prueba. El plantel de Talleres estuvo ensayando penales. “Vimos la definición de Newell’s. Hay que tener un poco de suerte y tener la tranquilidad necesaria a la hora de rematar, después te lo pueden atajar o ser gol. Cuando llegue su momento veré a qué palo patear en caso de que me toque”, dijo Gonzalo Klusener, especialista en la materia. “Uno analiza los penales y las ejecuciones. Pero todavía falta, así que llegado el momento haremos más hincapié”, agregó Diego Aguiar, héroe ante Sportivo.-
FUENTE: (http://mundod.lavoz.com.ar).-
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