El 24 de julio, Macarena Ceballos escribirá una nueva página en su libro de vida. Ese día debutará en la eliminatoria de los 100 metros pecho del mundial de Budapest. “Va a ser una experiencia hermosa. Voy con la mejor expectativa, siento que puedo mejorar mis marcas”, dice la riocuartense que el lunes partirá hacia Hungría.
La riocuartense ha tenido hasta aquí un año brillante. En mayo, en el Trofeo María Lenk, Ceballos batió el récord sudamericano en los 200 metros pecho y los argentinos de 50 y 100. Esas marcas le dieron la clasificación al mundial. “Ese fue el puntapie inicial para empezar a trabajar para el mundial. Sabía que estaba entrenando bien, pero no me esperaba ese rendimiento. Creo que a partir de allí seguimos trabajando de la mejor manera, por eso voy con buenas sensaciones a Hungría”, cuenta Macarena a pocos días de iniciar un nuevo desafío.
Si bien ya participó del mundial de pileta corta el año pasado, está será la primera experiencia en un campeonato de esta envergadura. “La idea es disfrutar del torneo. Además, somos una buena cantidad de argentinos, por lo que va a tener un sabor distinto”, describe la riocuartense.
El objetivo que se plantearon Macarena y su entrenador en Budapest es llegar a las semifinales, es decir, estar entre las 16 mejores, en cada una de las especialidades. “Va a ser difícil porque es un mundial y están las mejores. Pero la meta son las semifinales. En cuanto al tiempo, debería mejorar entre 60 y 70 centécimas en cada una de las pruebas. Por como hemos venido trabajando creo que lo puedo conseguir”, explica Ceballos.
El cronograma de la formada en el Centro 11 indica que el 24 se tirará a la pileta en los 100 pecho. El 27 será el turno de los 200 metros pecho y el 29 cerrará con los 50 metros pecho.
El mundial implica el primer desafío del ciclo que finalizará en los Juegos Olímpicos de Tokio en 2020. “La meta a largo plazo son los Juegos. Si tenemos un buen mundial, será un impulso, pero si no, no cambia nada. La idea es poder conseguir la clasificación a las olimpíadas”, remarca Macarena.
En cuanto al apoyo que recibe de las distintas entidades, Ceballos destaca la beca que recibe del Enard. “Además, tengo una de la Secretaría de Deportes, que si bien a veces se demora, también ayuda. Por otro lado, está la de Deportes Río Cuarto”, señala la nadadora.
El mundial comenzará hoy con la ceremonia inaugural y las pruebas de nado sincronizado y saltos ornamentales. En Budapest estarán los máximos referentes de la disciplina y entre ellos habrá una riocuartense.
La riocuartense ha tenido hasta aquí un año brillante. En mayo, en el Trofeo María Lenk, Ceballos batió el récord sudamericano en los 200 metros pecho y los argentinos de 50 y 100. Esas marcas le dieron la clasificación al mundial. “Ese fue el puntapie inicial para empezar a trabajar para el mundial. Sabía que estaba entrenando bien, pero no me esperaba ese rendimiento. Creo que a partir de allí seguimos trabajando de la mejor manera, por eso voy con buenas sensaciones a Hungría”, cuenta Macarena a pocos días de iniciar un nuevo desafío.
Si bien ya participó del mundial de pileta corta el año pasado, está será la primera experiencia en un campeonato de esta envergadura. “La idea es disfrutar del torneo. Además, somos una buena cantidad de argentinos, por lo que va a tener un sabor distinto”, describe la riocuartense.
El objetivo que se plantearon Macarena y su entrenador en Budapest es llegar a las semifinales, es decir, estar entre las 16 mejores, en cada una de las especialidades. “Va a ser difícil porque es un mundial y están las mejores. Pero la meta son las semifinales. En cuanto al tiempo, debería mejorar entre 60 y 70 centécimas en cada una de las pruebas. Por como hemos venido trabajando creo que lo puedo conseguir”, explica Ceballos.
El cronograma de la formada en el Centro 11 indica que el 24 se tirará a la pileta en los 100 pecho. El 27 será el turno de los 200 metros pecho y el 29 cerrará con los 50 metros pecho.
El mundial implica el primer desafío del ciclo que finalizará en los Juegos Olímpicos de Tokio en 2020. “La meta a largo plazo son los Juegos. Si tenemos un buen mundial, será un impulso, pero si no, no cambia nada. La idea es poder conseguir la clasificación a las olimpíadas”, remarca Macarena.
En cuanto al apoyo que recibe de las distintas entidades, Ceballos destaca la beca que recibe del Enard. “Además, tengo una de la Secretaría de Deportes, que si bien a veces se demora, también ayuda. Por otro lado, está la de Deportes Río Cuarto”, señala la nadadora.
El mundial comenzará hoy con la ceremonia inaugural y las pruebas de nado sincronizado y saltos ornamentales. En Budapest estarán los máximos referentes de la disciplina y entre ellos habrá una riocuartense.
FUENTE: (Agustín Hurtado) - (http://www.puntal.com.ar) - FOTO: (Internet).-
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