La institución adquirió 260 hectáreas en el 2004, que han sido explotadas agropecuariamente, pero la rentabilidad ya no es la misma y es por ello que evalúan una inversión inmobiliaria con una nueva cancha.Los directivos del Río Cuarto Golf comenzaron a analizar la posibilidad de hacer uso del campo, La Macarena, de 260 hectáreas, que tienen frente a la cancha actual, cruzando la ruta 30.
El pasado martes se celebró en la sede social de la institución una reunión informativa para los socios sobre las gestiones que realizaron algunos de los integrantes de la actual comisión directiva en Estados Unidos.
Con la presencia del presidente Luis Tazzioli, del vice Ernesto Jorba y de los otros dos integrantes de la delegación que estuvo en Norteamérica, Fabián Zanotti y Guillermo Masciarelli, se conocieron detalles de lo que fueron las entrevistas que tuvieron con tres reconocidos desarrolladores de canchas en Estados Unidos.
En primer lugar, Luis Tazzioli aclaró que no fueron en representación de la institución, sino que la gestión que se hizo fue más bien personal, ya que aprovecharon la estadía en ese país con sus familias.
“La idea es que estos desarrolladores nos abran un poco más la cabeza para ver qué podemos hacer a futuro con nuestro campo llamado La Macarena.
Para que tengan un conocimiento de la extensión de este terreno, es un poco más del doble de nuestra cancha y sesenta loteos. Es un proyecto muy importante y bastante complicado para llevarlo a su fin.
Por ello es que Ernesto (Jorba) se comunicó con esos estudios, dos en Palm Beach y uno en Chicago.
Para mí fue una experiencia muy linda y quiero agradecerles el trabajo que hicieron los tres restantes de la delegación que estuvo allá para poder llegar a hablar con estos especialistas en el desarrollo de cancha de golf”, precisó Tazzioli.
A su turno, Ernesto Jorba luego de dar las especificaciones del campo que es propiedad de la institución, que fue comprado en el año 2004 y que ha sido alquilado para la siembra de diferentes cereales resumió lo que fueron las entrevistas con los equipos de Greg Norman, Jack Nicklaus y Mattew Dusenberry.
Jorba dio a conocer los costos que éstos presupuestaron para un eventual desarrollo de una cancha, los que van desde los 400 mil dólares a 3 millones de la misma moneda. Todo depende de qué tipo movimiento de suelo se le quiera dar al campo de juego y la cantidad de hoyos y la forma en la que estén distribuidos los lotes que la rodeen.
Por otra parte, comentó e hizo una comparación de los costos por demás elevados para poder jugar al golf en EE.UU. y los ingresos que se tienen en nuestra ciudad con los mil socios con los que cuenta el RCGC.
El interés de los directivos del Río Cuarto Golf Club de estudiar la alternativa de un posible desarrollo urbanístico con una nueva cancha de golf se debe a que los ingresos que produce este campo son vitales para el mantenimiento de la actual cancha, pero la realidad es que ya no es tan productivo como hace diez años atrás. Para dar un ejemplo, con el producido de las primeras cosechas se podría pagar siete meses de sueldos de todo el personal, en cambio, ahora sólo uno.
Por otra parte, un dato que hay que tener muy en cuenta es el mantenimiento que llevaría un nuevo campo de juego y si hay potenciales clientes que quieran acceder a este emprendimiento.
Hoy por hoy, salvo en los meses de junio y julio debido a la poca cantidad de horas con luz natural que hay, en el resto del año la actual cancha no se encuentra atascada de jugadores y esto también es un dato a tener en cuenta para llevar adelante una inversión millonaria en las tierras que por ahora sólo han sido explotadas para al actividad agropecuaria.
Varios integrantes de la comisión directiva del RCGC no están de acuerdo en hacer un nueva cancha porque podrían poner en riesgo las finanzas de la institución y más teniendo en cuenta que en otras ciudades del país, hasta más grandes que la nuestra, la gente prefiere realizar una inversión en un lote sin cancha de golf por los gastos fijos que ésta conlleva.
Sin lugar a dudas, habrá otras reuniones más y, por ende, asambleas para seguir debatiendo qué hacer con el campo La Macarena, con la idea de una proyección a futuro.
FUENTE: (Darío Pablo Palacio) - (http://www.puntal.com.ar) - GRAFICO: (Internet).-
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