sábado, 3 de octubre de 2015

FÚTBOL: ENTREVISTA: SON PARTE DE LA HISTORIA: Mario Borgognone: “Soy un agradecido a la vida por haberme permitido jugar al fútbol” - FUENTE: (José Luis Debernardi) - (http://www.puntal.com.ar) - FOTO: (http://paginaceleste.blogspot.com.ar).-

De exitoso paso por Toro de Coronel Moldes, Estudiantes e Instituto, hoy se dedica a su profesión de pastelero. Dirige la categoría 2005 de San Martín de Vicuña Mackenna y por ahora no está en sus planes dar el salto a primera.-
Nacido en Tosquita el 10 de abril de 1971, Mario Borgognone fue uno de los jugadores destacados que tuvo el fútbol de la Liga Regional en la década del 90. Con inicio en San Martín de Vicuña Mackenna y de exitoso paso por Toro Club de Coronel Moldes y Estudiantes de Río Cuarto, llegó a jugar dos temporadas en la B Nacional en Instituto de Córdoba.
Hoy se dedica de lleno a su actividad particular y sigue ligado al fútbol dirigiendo la categoría 2005 de San Martín de Vicuña Mackenna.
Sobre su pasado y su presente dialogó con PUNTAL.
- ¿Qué es de la vida de Mario Borgognone? ¿Sigue relacionado con el fútbol?
- Hoy estoy de pastelero en la panadería de mi suegro. En la parte deportiva estoy ligado a San Martín dirigiendo la categoría 2005. Y en primera veo a San Martín porque sigo a mi sobrino (el arquero Guillermo Oviedo Borgognone).
- ¿Cómo ve al fútbol de Vicuña Mackenna y al de la Liga en general?
- Al fútbol de Mackenna lo favoreció que volvió el clásico. La gente que va a la cancha es impresionante y también la que llevan a cada partido que van a la región. Con la vuelta del clásico se logró la convocatoria de la gente. En Belgrano dirige un amigo como es Walter Abbona, que es muy buen técnico. El Negro le está dando a Belgrano no sólo la posibilidad de seguir en primera, sino que también está peleando en los primeros puestos. A San Martín le está costando por las lesiones. Está en una etapa de comenzar de nuevo con su juego. Del equipo campeón hay cinco bajas, la están peleando y saliendo a flote. El campeonato en general es lindo, parejo. Con un Estudiantes que está por encima del resto, un escalón arriba.
- Dirige una categoría infantil, ¿por qué no en primera?
- La chance de dirigir primera estuvo en algún momento y dije que no. Hoy por hoy estoy dedicado exclusivamente a disfrutar de mi familia. Una familia muy linda, numerosa con tres hijos. Disfruto de ellos. Cuando uno es director técnico tiene que abocarse de lleno y eso quita la posibilidad de estar con tus afectos. Por el momento no está en mis planes. Más adelante, cuando los chicos crezcan, tal vez. Y dirigir los más chicos es porque te ofrecen sencillez, amor, fidelidad. Hablar con ellos es muy agradable. Además es una forma de darle una mano al club. Uno lo hace ad honórem. Para los clubes, es complicado subsistir y esta es una manera de ayudar.
¿Qué le quedó de su época de jugador?
Los mejores recuerdos. Soy un agradecido a la vida por haberme permitido jugar al fútbol. Soy un agradecido de haber jugado y también de haber llegado, sin querer queriendo, a Coronel Moldes...
- ¿Qué fue para usted Coronel Moldes, más precisamente Toro?
- Fue todo. Tengo el recuerdo que me fueron a buscar el Cuqui Carrizo y Aldo Kalbermatten a Jovita, que es donde estaba viviendo, para llevarme a Toro. A un Toro ganador, con Carrizo salimos campeones con un equipo impresionante. Con el Viejo (Walter) Garro, Silvio (Garro), el mejor goleador que vi jugando a mi lado como fue Darío Giordano. Jugadores bárbaros. De Sampacho estaban Cruceño y Pereyra. Nicolay que recién arrancaba, el Tatuti Carignano. Un equipo extraordinario.
- ¿Ahí lo ve Estudiantes? ¿Cómo llega a Instituto?
- Mi llegada a Estudiantes se da para el Interligas del 93. Juan Irigoyen lleva a cinco jugadores de Toro. Se armó un equipo con jugadores de la Liga y le ganamos la final a Central de Río Segundo. Ese torneo sirvió para que me viera Instituto y me lleve Arraigada que era el técnico.
- ¿Qué le dejó esa experiencia en Córdoba?
- Fue una sensación rara, agridulce. De Instituto tengo el mejor recuerdo al igual que en todos los lados en los que jugué. Pero ese fue un momento difícil en lo familiar. A fines del 91 perdí a mi hermana de 18 años que dejaba a mi sobrino de dos meses (Guillermo). Mi vieja estaba muy mal. Entonces yo estaba parte allá y parte acá con mi familia atravesando una situación muy delicada. En lo deportivo fueron dos años espectaculares, lindos. Pirucho Leiva me aconsejó muchísimo, quería que me quedara, los dirigentes también. Pero decidí regresar. Prioricé lo familiar sobre lo deportivo. Estaba en pleno crecimiento como futbolista, pero le di más importancia a la familia.
- Y otra vez Toro y Estudiantes se cruzan en su camino...
- Siempre volvía a Toro, era mi casa. En esa época comenzaban los torneos argentinos y jugué tres temporadas seguidas en Estudiantes. Tengo los mejores recuerdos de ambos clubes. De Toro soy hincha y, en otro nivel, de Estudiantes. Cuando Estudiantes juega en otra categoría uno siempre ruega que le vaya bien. Ahí dejé un montón de amigos.
- Estando tan ligado a Toro y a Coronel Moldes, ¿cómo vivió estas participaciones en el Federal B y en la Copa Argentina?
- La gente de Moldes siempre fue pujante. Siempre quiere algo más porque no se conforma con lo que tiene, con lo local. Siempre quizo llegar a algo más. En mi época jugamos los viejos Argentinos B. Y con lo complicado que eran siempre hicimos buenas campañas.
- ¿Un amigo que le dejó el fútbol?
- El Chepe Flores. Con él vivimos en la popular Fabella (en la tribuna del estadio de Estudiantes). Pero la Fabella pobre, la de nuestra época, no la de ahora. El Chepe es un tipo bárbaro. Con todos sus problemas de la rodilla, sus lesiones, siempre estaba con una sonrisa. Una persona increíble de admirar, porque jugaba poco por sus lesiones, pero siempre fue pujante. También el Negro (Luis) Carranza y Dino Salvay. Cuando era chico y recién empezaba a jugar lo tenía que enfrentar al Negro y decía este te mata. Pero como compañero  era extraordinario. En la cancha te defendía, le metía el pecho, el  Dino también. Son todos recuerdos muy lindos.
- ¿Un director técnico?
- No tuve tanta cantidad. Me quedó con Juan Irigoyen. Siempre lo nombré porque me gustaba como trabajaba, con mucha seriedad. En Instituto, Ginarte. Era un tipo que veía el fútbol distinto. No tanto en la parte física sino que era todo táctico y técnico. Trabajaba mucho y le sacaba el jugo.
- ¿Un rival?
- En mi época de Toro con Atenas eran clásicos . Ellos tenían un central, Marcelo Magnani creo, y eran unos duelos terribles con ese muchacho.
- ¿Un jugador actual?
- Maxi Comba. Es un jugador de otro nivel. Lástima que no sé si es él o la dirigencia de San Martín que no lo deja salir. Es de otro nivel. Tiene velocidad, gambeta, es guapo. No tengo dudas de que es de otro nivel.
FUENTE: (José Luis Debernardi) - (http://www.puntal.com.ar) - FOTO: (http://paginaceleste.blogspot.com.ar).-

No hay comentarios:

Publicar un comentario